LA DIRECCIÓN DEL CONCEJO MUNICIPAL


Redacción: Prensa y Comunicaciones

Al Concejo Municipal lo dirige la Mesa Directiva que está conformada por un Presidente, un Primer Vicepresidente y un Segundo Vicepresidente elegidos por un período de un año.

Al Presidente le corresponde entre otras funciones: Convocar; presidir y dirigir las sesiones plenarias del Concejo; actuar en representación del Cabildo en los actos y actividades que le correspondan; liderar la representación política de la Corporación; designar ponentes de los proyectos de acuerdo; requerir a los Presidentes de las Comisiones Permanentes sus informes dentro de los términos legales; solicitar a las entidades públicas o privadas en nombre del Concejo los documentos e informes que se requieran para el cumplimiento de las funciones; dirigir los debates, mantener el orden y hacer cumplir el reglamento interno.

“Durante mi Presidencia se está haciendo un buen trabajo en las comisiones y en los debates de proyectos y de control político; estamos cumpliendo lo que ordena la Constitución y la Ley: autonomía e independencia. Aquí es importante resaltar que en el Concejo no somos ordenadores del gasto y no tomamos decisiones. Nosotros lo que hacemos es control político y apoyamos las iniciativas que llegan del Ejecutivo”. Afirmó la Presidenta del Concejo para el periodo 2018, Nancy Lora.

Es así como en este año las directrices de la Presidencia han sido abordar problemas sentidos de la ciudadanía para evitar que se cometan atropellos contra los habitantes de la Capital Santandereana; advertir a la Administración Municipal los errores que se estén cometiendo y que van en contra de la Ley y del bienestar social de los bumangueses, aprobar proyectos y acuerdos que beneficien a los
ciudadanos.

Entre los temas relevantes que se han trabajado en el primer periodo de sesiones ordinarias se destacan: La advertencia por parte del Concejo a la Administración Municipal del cobro ilegal del Impuesto de Industria y Comercio a Profesiones Liberales; escasa ejecución de obras de infraestructura; el deterioro de los escenarios deportivos de la ciudad; las posibles irregularidades en la contratación de la Empresa de Aseo de Bucaramanga; la falta de mantenimiento de los centros
de salud del municipio; la falta de gestión ante el Gobierno Nacional para salvar el Sistema Integrado de Transporte Masivo Metrolínea y para conseguir recursos para la construcción de vivienda de interés social; Informes de Gestión de las diferentes oficinas de la Alcaldía y debates de control político, entre otros.

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